Los quemantes rayos del sol pegan de lleno. Buscando una sombra, don Dolores López constriñe sus puños. Se acomoda al pie de una tumba y desde ahí observa el protocolo durante el homenaje que ayer jueves se le rindió a los fundadores del Ejido de Jala.

Se monta una guardia sobre la tumba de don Epifanio Gómez - principal impulsor de este ejido -. Don Eduardo se despoja del sombrero al escuchar trompetas y tambores.

El orador del evento empieza su perorata. Habla y se remonta a la década de los años 30´s cuando ocurrió la fundación de este ejido.

En el evento por la conmemoración del LXXIX aniversario de la fundación de este ejido, se resalta la memoria de Don Epifanio Gómez, de don Refugio Ventura y de don Juan González García. Se recuerda la lucha agraria que junto con ellos libraron los campesinos para exigir un pedazo de patria para cultivar sus tierras.

Los festejos iniciaron con el tradicional recorrido que se realiza año tras año hacia el cementerio, lugar donde se depositó una ofrenda floral, al pie de la tumba de Don Epifanio Gómez, principal fundador del Ejido.

A los festejos, como ocurre cada año, se sumaron también los alumnos y el personal docente del Instituto Tecnológico del Sur de Nayarit; y dentro de ese mismo marco se hizo una remembranza de la fundación del Ejido y de la sangre que derramaron sus principales impulsores para que se les dotara de un pedazo de tierra, lo que a la postre arrojó resultados positivos.

Así mismo se realizó un evento literario, con poesías y bailables; y poco después del mediodía, los ejidatarios e invitados especiales, como hermanos todos y en medio de una gran fraternidad, disfrutaron de un alegre convivio, en el viejo caserón que se localiza al pie de los Lavaderos.